La Plaza Mayor de la Ciudad de Quetzaltenango · Capítulo VII – Siglo XIX
La Plaza Mayor o Parque Central de Quetzaltenango (denominado actualmente como Parque a Centroamérica), encierra un profundo contenido histórico el que, para propósitos de rápida comprensión, podemos dividir en dos periodos: el de la época colonial, cuando a su alrededor se contaba con construcciones de adobe y techumbres de teja; y el periodo de su actual configuración, con edificios en piedra de estilo Neoclásico o como también se le conoce: Clasisista; construidos desde mediados del Siglo XIX y principios del Siglo XX, época de auge en la producción y exportación de café de la región sur-occidental del país.
El prefijo “Neo” (de Neoclásico) hace referencia a su relación con un periodo artístico del pasado, en este caso al conocido como Clásico de Grecia y Roma, con construcciones muy simétricas y columnas dóricas, jónicas o corintias. Es importante destacar que la expresión que vemos en el arte (la arquitectura en este caso), refleja la vida social de su época.
Sobre el pasado Colonial se sabe que circundaban la Plaza Mayor varios edificios: el del Corregimiento provincial y la diputación consular; la administración de la pólvora, el salitre y el naipe; la receptoría de alcabalas; la estafeta de correos y la delegación de tierras, edificaciones éstas que denotan la importancia que desde entonces tenía la Ciudad que, como lo refiere Pedro Cortés y Larraz en su “Descripción geográfica de la Diócesis de Goathemala”, (1768) era “un pueblo crecido y hermoso, con calles bien formadas y casas de teja, con mucho comercio y en donde se proveen de todo lo necesario esta provincia como las de Totonicapán y Sololá”.
Los edificios alrededor de la Plaza Mayor se encontraban de la siguiente manera: al norte el portal de Sánchez o de las panaderías (actualmente sitio que ocupa el edificio de Banco Industrial, diseño original de Carmen Rímola); al oriente el portal de Anguiano o de las mantequeras (hoy sitio del Edificio Rivera, diseñada por Francesco D´Amíco); la Casa Consistorial (hoy lugar del Edificio de la Municipalidad, diseño de Domingo Goicolea); y la Iglesia del Espíritu Santo y Convento de los Franciscanos (hoy sitio de la Catedral de Quetzaltenango y sede del Arzobispado de los Altos). Al sur se localizaba el Cementerio, en terreno que pertenecía a la Iglesia (en este sitio se construyó por órdenes del General Justo Rufino Barrios el Edificio de la Penitenciaria, hoy Casa de la Cultura). Al poniente el Convento de Belén (lugar que ocupa la Casa Noj, y que fuera propiedad del Licenciado Manuel Estrada Cabrera y más tarde el edificio de Gobernación). Y en donde hoy se encuentra el edificio conocido como Pasaje Enríquez (diseño de Alberto Porta) se encontraba el Cuartel General, edificio de dos plantas que fuera la “Casa Real” y sede del Corregimiento. Le sigue al nor-poniente el edificio que hoy ocupa el hotel Villa Real.
Al centro de la Plaza Mayor se localizaba el portal de las Banderillas, que dividía la plaza en dos espacios, uno, el del norte, dedicado al comercio (mercado), con una fuente central que abastecía de agua a la población; y del lado sur de la plaza el espacio dedicado a usos religiosos, en medio del cual se encontraba una gran cruz de madera.
Del diseño de la Plaza Mayor, construida en forma de damero según la tradición española, tenemos evidencia en grabados que realizo el escocés Frederick Catherwood en el año 1840, y fotografías del fotógrafo inglés Eadward Muybridge realizadas en 1875 (Ver paginas 183,184 y 185).
En la mitad de la Plaza Mayor, como mencionado, se encontraba el portal de las Banderillas, y en 1861 se construyó una torre con un reloj en su parte superior, torre que se conocía como la Torre del Rolex, la cual fue demolida en 1902 transformándola en la Torre de Centroamérica, la cual a su vez fue “dinamitada” por órdenes del General Jorge Ubico el año 1935, quien también ordenó el traslado del Quiosco que adornaba la plaza al Parque a Minerva (cercano al actual Zoológico), construyéndose un redondel con sillares en piedra, columnas y remate superior en forma de anillo. En el sitio que ocupaba la torre se construyó el monumento a Justo Rufino Barrios (obra del escultor Rafael Yela Günther). Previo a ello, ya en 1899 se demolió el Portal de las Banderillas, diseñándose de nuevo la Plaza por los ingenieros Camey y Aguilar Peláez (1901), conformándose como los Jardines de la Unión y los Jardines de la Juventud.
Los edificios que rodean el Parque a Centroamérica de Quetzaltenango son de estilo Neoclásico (Clasisista); y el conjunto que hacen con el Parque constituyen una unidad monumental de gran belleza, único en Latinoamérica.
Roberto Gutiérrez Martínez
El que está enfermo, no es común ni corriente
Ha trascendido por medio de las redes sociales, Alejandro Giammattei está hospitalizado en un centro hospitalario privado, desde el viernes 5 de septiembre. Al parecer su enfermedad es crónica. En ese sentido, el enfermo que está recluido en ese lugar, no es común ni corriente, es actual diputado al PARLACEN -ese antro político al que él dijo, cuando sería presidente de Guatemala, iba a cerrarlo porque no sirve para nada y que es cueva de ladrones; totalmente de acuerdo con él, corrió y se refugió tal y como lo hizo otro amigo suyo, Jimmy Morales. Además, hace apenas 20 meses se convirtió en el primer presidente de la república de Guatemala que no quiso entregar la banda, el botón y el bastón presidenciales, símbolos o insignias más evidentes del cargo que, pasan de un presidente a otro en señal del traspaso de poder; a Giammattei, le importó un comino, dejó tirado las insignias y se fue al PARLACEN.
Pero, lo que es aún más evidente y causa repugnancia fue el saqueo de bienes materiales y humanos en grandes proporciones que realizó este enfermo, que no es común ni corriente en ese hospital privado. Cuando digo, saqueo material, me refiero a los miles de millones robados, sí, literalmente robados, de las arcas nacionales en contubernio con su pareja sentimental Miguelito, el más reciente, conocido como Caso B410, el diputado Chic presentó una querella penal acusando de incumplimiento de deberes, abuso de autoridad, tráfico de influencias, asociación ilícita y pacto colusorio, también está, la compra de las vacunas, la alfombra mágica, etc. Por supuesto, estos y todos los delitos cometidos por este enfermo, que no es común ni corriente en ese hospital, jamás serán investigados, perseguidos ni nada parecido por el MP de Porras. Sin embargo, para ahorrarle la fatiga y presupuesto al ente investigador, los valientes periodistas Marvin del Cid y Sony Figueroa, entregaron libros de autoría suya, donde exponen, con evidencia, la corrupción sin límites de este enfermo, que no es común ni corriente.
El saqueo humano se dio con evidencias contundentes en 2020, su primer año de corrupción, me refiero a las más de 20 mil personas fallecidas por no tener medicinas, personal ni equipo médico, para combatir la pandemia de COVID-19. Este enfermo, que no es común ni corriente, viendo con sus propios ojos, el sufrimiento y agonía de su gente, ni lerdo ni perezoso, solicitó préstamos y más préstamos con el pretexto de hacer hospitales y comprar vacunas, lo que hizo fue engordar su patrimonio y la de su pareja sentimental. También considero el saqueo humano, la construcción de 14 escuelas centenarias, de las cuales, únicamente se terminó de construir una. El costo total de este proyecto fue más o menos de 700 millones de quetzales. Pero, y, ¿cuándo iniciará su trabajo el ente investigador?
Este martes 9, Giammattei recibió el sacramento de la unción de los enfermos, sacramento que otorga gracia espiritual, paz y consuelo, y, prepara al enfermo para el paso a la vida eterna o para una recuperación.
Yo, en la particular, y lo digo con total franqueza, espero su pronta recuperación, y, que tenga las agallas suficientes para pedirle perdón a todo un pueblo que aún está sufriendo los desmanes de su gobierno. Le pido a sus diputados, esos que aprobaron el día de la Biblia, que les lean el Capítulo 19, versículo 8 y 9 del libro de Lucas, estoy seguro, fortalecerá su espíritu y también será de ejemplo para sus diputados.
Para qué sirve el arrepentimiento, si eso no borra nada de lo que ha pasado. El arrepentimiento mejor es sencillamente cambiar. José Saramago
Arnoldo Soch Tzul
Contador Público y Auditor, asesor financiero y fiscal de pequeñas y microempresas, exalcalde comunitario, auditor social desde hace más de 25 años.
¿Libertad o ficción? Repensando la Independencia del 15 de septiembre
A casi 200 años de la firma del acta, Guatemala sigue lidiando con un "colonialismo interno".
¿Hemos celebrado la Independencia de Guatemala como un logro o como una fantasía? Aunque cada año, el 15 de septiembre, nos vestimos de azul y blanco, entonamos el himno nacional y desfilamos con fervor, es crucial que nos detengamos a preguntar: ¿de qué nos independizamos realmente y quiénes se beneficiaron de ese acto?
La historia oficial nos cuenta un relato de libertad y soberanía, pero la realidad, especialmente para los pueblos indígenas y las clases desfavorecidas, fue mucho más compleja. La firma del Acta de Independencia en 1821 no fue una revuelta popular, sino un acuerdo entre las élites criollas.
Preocupadas por el avance de las ideas liberales en España y la inminente independencia de México, decidieron tomar las riendas del poder para mantener sus privilegios. Este movimiento, lejos de ser un grito de libertad para todos, fue una maniobra estratégica para asegurar que el poder económico y político permaneciera en manos de los mismos grupos que lo ostentaban durante la época colonial.
La mayoría de la población, en su gran parte indígena y mestiza, no participó en este proceso ni se vio beneficiada por él. Sus tierras, sus derechos y sus estructuras sociales fueron ignoradas. La firma del acta no alteró significativamente su estatus de subordinación; simplemente cambiaron de amo. En lugar de ser controlados por la corona española, pasaron a estar bajo el dominio de las nuevas élites locales, perpetuando un sistema de desigualdad que, lamentablemente, persiste hasta nuestros días. El 15 de septiembre se celebra una emancipación que, para la mayoría de los guatemaltecos, nunca llegó.
A casi 200 años de la firma del acta, Guatemala sigue lidiando con un "colonialismo interno". Los mismos patrones de exclusión, discriminación y despojo que existían en la colonia continúan vigentes, y esto tiene un impacto directo en la salud de nuestra población. La inequidad social y económica es una herida abierta, y se refleja de manera dramática en el acceso a la atención médica. Las comunidades rurales y, en particular, las poblaciones indígenas, enfrentan barreras significativas para acceder a servicios de salud de calidad. La falta de infraestructura, de personal médico capacitado y de medicinas en las áreas más remotas es una constante. Esto se traduce en mayores tasas de mortalidad infantil, desnutrición crónica y enfermedades prevenibles que persisten. Las cifras lo confirman: somos un país con una de las mayores brechas entre ricos y pobres de América Latina, y esa brecha se refleja directamente en la salud y el bienestar de nuestros ciudadanos. Por ello, celebrar el 15 de septiembre sin una reflexión crítica es, en muchos sentidos, una conmemoración vacía.
La verdadera Independencia no se alcanza en un día con la firma de un documento. Es un proceso continuo de construcción, de autocrítica y de inclusión. El verdadero patriotismo no está en las banderas o los desfiles, sino en el compromiso diario de construir una nación más justa, equitativa y respetuosa de la diversidad que la compone. Celebrar el 15 de septiembre debería ser un momento para reconocer el pasado, honrar la memoria de quienes realmente han luchado por la justicia y, sobre todo, renovar nuestro compromiso con la creación de un futuro donde la libertad y la dignidad sean una realidad para todos los guatemaltecos, sin distinción.
Sara María Mendoza G.
Experta en sexualidad, derechos sexuales y reproductivos. Médica General, con especialidad en Ginecología y Obstetricia. Tiene una Maestría en Sexualidad Humana.
OpiniónSociedad
Comunicación asertiva en casa
Dentro de la familia, es importante porque ayuda y beneficia la forma de interactuar, caracterizándose por la honestidad, el respeto y la empatía.
La comunicación surge desde el momento en que los bebés están en el vientre de la madre, donde comienzan a reconocer las voces del papá y de la mamá. Al nacer, las formas de comunicarse se desarrollan primero con el llanto, luego con balbuceos, hasta que aprenden a hablar. Posteriormente, adquieren otras palabras y son capaces de comunicarse verbalmente.
Sin embargo, la asertividad en la comunicación es una herramienta necesaria para una comunicación familiar efectiva. La comunicación asertiva es la habilidad de expresar lo que se siente, necesita o piensa sin faltarle el respeto a los demás, y que los otros también respeten a la persona que se está expresando.
Dentro de la familia, es importante porque ayuda y beneficia la forma de interactuar, caracterizándose por la honestidad, el respeto y la empatía.
Los beneficios de desarrollar esta habilidad incluyen fortalecer el vínculo familiar, hacerlo más estable, mejorar la convivencia y facilitar la resolución de asuntos, generando un ambiente de confianza donde todos los miembros de la familia se sientan valorados y comprendidos. Lo más importante es que ayuda a los menores a expresar sus emociones de manera adecuada, desarrolla su autoestima y les enseña a establecer límites y expresarlos correctamente.
Para poder desarrollar la comunicación asertiva en casa, es necesario implementar los siguientes pasos:
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Establecer contacto visual cuando se esté hablando con otra u otras personas.
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Evitar estar viendo o haciendo otra cosa cuando alguien desea comunicar algo. Si está realizando otra actividad y la otra persona desea hablar sobre algo importante, deje lo que está haciendo y preste atención a la conversación.
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Cuando esté comunicando algo, asegúrese de que sus expresiones faciales coincidan con lo que está diciendo.
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Mantenga la calma mientras habla y evite agitarse.
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Sea educado, pero muestre firmeza en lo que dice.
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Escuche activamente.

Crysta Nowell
Psicóloga Industrial / Organizacional, Magíster en Gestión del Talento Humano, asesora en procesos de recursos humanos, capacitadora y especialista en reclutamiento y selección de personal.
OpiniónPsicología
Esta noche recibimos a las reinas nacionales e internacionales
Esta semana quisimos recibirlas como lo merecen: con buena comida, música y la calidez de una ciudad que sabe ser anfitriona.
Hoy quiero expresar un profundo agradecimiento a las reinas nacionales e internacionales que nos honran con su presencia en Quetzaltenango. Gracias por aceptar la fiesta de bienvenida que, con entusiasmo, hemos preparado desde La Voz de Xela y nuestros patrocinadores.

César Pérez Méndez
Licenciado en Ciencias de la Comunicación (Usac), con tres maestrías en diferentes campos y Doctor en Investigación en Educación (Usac). CEO de La Voz de Xela, profesor universitario y conferencista.
Despedidas de graduandos: un legado en Quetzaltenango
Estas despedidas se realizan el 15 de septiembre, después del desfile, y son invaluables para los graduandos y para quienes cambian de centro de estudios.
La sociedad guatemalteca se debate entre quienes celebran la Independencia que lograron los criollos que vivían en Guatemala respecto a la corona española y quienes no le dan importancia a este acontecimiento, por considerar que la población no es independiente y que no están dadas las condiciones en el país para ser soberano.
Existe una parte de la población que sí celebra las fiestas de Independencia con el mejor de sus esfuerzos; esta se representa en la niñez, adolescencia y juventud, para quienes estas fechas no son una conmemoración de Independencia, sino un cambio en su vida académica. Son comunes los ensayos de las bandas escolares, batonistas, gastadores y comitivas de desfiles en escuelas, institutos y colegios.
Lejos de las posturas que están en contra de los desfiles, para estos jóvenes y niños, estas fiestas no significan solo una actividad más de conmemoración. Muchos esperan la despedida de quienes ya no continuarán en su centro educativo, ya sea porque irán a otro o ingresarán a la universidad. Estas despedidas, en cada centro educativo, están llenas de nostalgia, tristeza, recuerdos imborrables y del significado del cambio de comandancias, abanderados, entre otros.
Estas despedidas se realizan el 15 de septiembre, después del desfile, y son invaluables para los graduandos y para quienes cambian de centro de estudios, pues representan decir adiós a la vida escolar conocida hasta ese momento, sabiendo que nada volverá a ser igual y que esos años vividos son los mejores y nunca regresarán.
En estas despedidas, hasta quien se cree el más hombre o la mujer más fuerte lloran; son esperadas por todos estos niños y jóvenes, quienes tienen todo el derecho de seguir transmitiendo este legado a las futuras generaciones. Por estas razones, los exalumnos vuelven cada año a ver la despedida y sentir que aún pueden revivir esos recuerdos en el corazón.

Vilma del Rosario Xicará
Con más de 20 años de experiencia en finanzas, auditoría pública, impuestos y rendición de cuentas. Docente universitaria, Contadora Publica y Auditora, y Dra. en Auditoría Gubernamental y Rendición de Cuentas y Transparencia en la función pública.
Opinión15 de Septiembre
Distribución de cargas a nivel empresarial
Idea sencilla: distribuir los recursos con justicia y un propósito claro ayuda a que la empresa funcione de forma más equilibrada y sostenible.
La distribución de cargas es una forma de usar mejor los recursos de la empresa. Consiste en repartir tareas y servicios entre equipos y sistemas para que todo funcione sin atascos y con menos riesgos.
Qué significa a nivel empresarial:
- Poner las tareas adecuadas en el lugar correcto.
- Evitar que una parte se llene de trabajo y otra quede vacía.
- Mantener las cosas funcionando incluso si hay cambios o hay fallos.
Ideas fáciles de seguir:
- Ver todo: conocer qué tareas hay, quién las usa y qué dependen de ellas.
- Priorizar: decidir qué es lo más importante y cuánto tiempo debe durar.
- Ajuste dinámico: mover recursos cuando aumenta la demanda o hay un problema.
- Confiabilidad: usar diferentes proveedores o rutas para no depender de una sola.
- Medir y planear: medir tiempos de respuesta, uso de recursos y cuánto tarda resolver problemas; hacer cambios de forma ordenada.
Qué beneficios trae:
- Menos costos y uso más eficiente.
- El cliente nota mejor experiencia y entregas más rápidas.
- La empresa puede adaptarse mejor a cambios y amenazas.
Deuteronomio 16:17
"Cada uno dé lo que tenga para dar según la bendición del Señor vuestro Dios, que os haya dado".

Edwin Ibarra
Médico Especialista en Cardiología y Ecocardiografía. Coach, conferencista y entrenador certificado por el Programa de John Maxwell, Pastor de la Red de Empresarios y Profesionales de Iglesia Bethania Quetzaltenango. Fundador de los Proyectos “Sanando el Corazón” y “Discipulado Empresarial 20/20”.
OpiniónLiderazgo
Lo que necesitas y no necesitas en tu closet
Inevitablemente, en su mayoría las mujeres caen en las compras compulsivas dictadas por temporadas, descuentos especiales, modas o tendencias. Los hombres, por el contrario, la gran mayoría no presume de falta de espacio en su parte del closet, son más prácticos y menos compulsivos en cuanto a prendas de vestir o accesorios. Sin embargo, cuando se trata de reorganizar el closet, se debe evaluar lo que está bien y lo que no. Podemos ajustarnos a ciertos detalles. ¿Qué necesitamos conservar?
1. Ropa que te hace sentir bien. Sin seguir modas o tendencias, que se ajusten a tus medidas y te hagan proyectar quién eres.
2. Prendas básicas. Que te permitan crear variedad de atuendos para oficina, trabajo o área social.
3. Prioriza calidad sobre cantidad. Para un closet funcional, la calidad es necesaria en tus prendas y accesorios.
4. Accesorios clave. Incluye zapatos para diferentes ocasiones, bolsas en buen estado, colores neutros y diseños que comuniquen tu personalidad. Bufandas, cinturones y joyería que eleven tus atuendos.
Lo que no necesitas
1. Prendas que no usas hace más de un año. Puede ser porque ya no te identificas con ellas, porque no es tu talla o simplemente le perdiste el gusto.
2. Prendas dañadas o desgastadas. Aquellas que ya no tienen reparación o muy deterioradas, debes eliminarlas.
3. Prendas que ya no se adaptan a tu estilo. Quizá fueron compras compulsivas, regalos o las de “ocasiones especiales” que nunca usas.
Puedes donar, vender o intercambiar, un closet bien organizado no solo optimiza el espacio, sino también facilita las decisiones de tu día a día y de futuras compras relacionadas con tu estilo y personalidad. Recuerda que, en los pequeños detalles, está el poder de tu imagen.

Carol Contreras
Coach de Imagen
Verse bien no es sinónimo de estar bien
En el mundo moderno estar bien se traduce en verse bien, por lo general si una persona ve a otra persona físicamente bien asocia el bienestar por la forma en la que la percibe, sin embargo, es importante resaltar que estar bien está íntimamente relacionado con la salud física, mental a sentirse satisfecho con la vida y tener un sentido de propósito, el concepto de estar bien puede variar en cada persona, ya que es algo muy subjetivo.
El deseo de Dios es que usted viva bien, pero debe entender que abarca todos los aspectos de su vida, por lo que constantemente es bueno realizar una autoevaluación del estado en el que se encuentra. Constantemente las personas se enfocan en sentirse bien físicamente, en relaciones laborales, familiares, pero en pocas oportunidades involucran tiempo para cuidar la vida emocional y espiritual, ahora bien, estos aspectos dependen si o si de la persona y no hay poder humano ni divino y discúlpeme si cree estoy cometiendo una herejía, lo que quiero expresar es que para todo debe haber una dosis de voluntad propia.
Recientemente, platiqué con una persona quien decía que oraba mucho a Dios porque su esposo cambiara hábitos y temperamento lo que provocaría según ella el bienestar de él y de toda la familia, con mucho aprecio le respondí: el problema es que Dios siempre va a querer, el tema es cuánto quiere el esposo rendir su voluntad a los deseos y propósitos de Dios.
Estar bien ¡está íntimamente ligado a la conexión con Dios!, y no me refiero a asistir con regularidad a una iglesia, trabajar en un ministerio como quien asiste a un gimnasio con regularidad para desarrollar su cuerpo, me refiero a permitir que sea Dios el instructor personalizado de nuestro caminar y de nuestra parte rendir la voluntad para hacer las mejores elecciones que evidentemente provocaran un bienestar.

Silvia Morales Paniagua
Docente de nivel primario y básico con Especialidad en Ciencias Naturales. Licenciada en Administración Educativa y Magíster en Educación Superior.
Rema mar adentro
“Cuando terminó de hablar, dijo a Simón: Rema mar adentro, y echen sus redes para pescar. Simón replicó: Maestro, hemos trabajado toda la noche y no hemos pescado nada; pero confiando en tu palabra echaré las redes. Entonces Jesús le dijo a Simón: no temas; desde ahora serás pescador de hombres”, (Lc 5, 1-11). Pedro echa las redes y pesca mucho.
Este mandato de Jesús a Pedro lo hemos meditado muchas veces. El fracaso de los discípulos era evidente. Venían cansados y desmotivados. Sus esfuerzos habían sido inútiles. Esta experiencia de vida podemos experimentarla también en nuestra vida. En más de alguna ocasión hemos pensado que los esfuerzos que hemos puesto en nuestro trabajo son en vano, porque nadie se da cuenta y nadie los valora. Trabajamos y trabajamos y nada.
Los padres de familia posiblemente experimentan esto con sus hijos. Les hablan y les hablan a sus hijos, y parece que sus hijos nos les hacen caso; y siguen haciendo lo que desagrada a Dios. En un trabajo, podemos experimentar esa frustración al ver que nuestro trabajo no es recompensado como nosotros queremos. Un estudiante puede pensar que, por más que se esfuerce, su dedicación no da fruto. Es posible que ante estas experiencias de vida haga falta algo: trabajar, estudiar y educar en nombre de Dios. Pedro dice: en tu nombre voy a echar las redes. Y las echa, y la consecuencia es una pesca milagrosa.
Nosotros, los que creemos en Cristo, tenemos que desempeñar nuestra misión, en el nombre de Dios. Tenemos que poner toda nuestra confianza en Dios que todo lo puede. Pero para que Dios haga milagros, es preciso creer en él. Caso contrario, las frustraciones y decepciones continuarán. “En tu nombre”, dice Pedro. Pedro no confía en su experiencia de pescador ni en sus habilidades. “En tu nombre”, voy a echar las redes.
Además de echar las redes en nombre de Jesús, Jesús le dice: “rema mar adentro”. Ese remar mar adentro, se entiende en dos sentidos. Remar hacia mi interior y ver mi vida como laico, sacerdote o consagrado. Pero significa también ver hacia fuera, ver nuestra vida comunitaria y parroquial. Significa ver nuestra empresa, nuestro negocio. Significa ver nuestra relación de pareja y como familia. Este remar mar adentro es una invitación para continuar buscando a Dios en lo más profundo de nuestro ser, y en la realidad sociopolítica en la que vivimos.
Por eso es que ese “remar mar adentro”, es una invitación para ver también la situación actual de la sociedad en la que vivimos. Guatemala aún está en manos de corruptos y gente interesada en sus propios proyectos. Pero en este mar, en este país, posiblemente hay muchos “peces” hambrientos y sedientos de la palabra de Dios. Remar mar adentro es una invitación para descubrir a los sedientos, a los que están sumidos en la depresión y la soledad. Esos peces sedientos de amor y paz pueden ser nuestros hijos, nuestra pareja y/o nuestros trabajadores.
Así como Jesús necesitó a Pedro para echar las redes, así también nos necesita en pleno siglo XXI para que rememos mar adentro y pesquemos a tantas personas que están sufriendo a causa de la injusticia, la corrupción y la falta de generosidad y amor por parte de los opresores de este tiempo. Para asumir con responsabilidad esta misión tenemos que estar dispuestos a “dejarlo todo”. Hay que dejar el egoísmo, el autoritarismo, el odio, la envidia y el resentimiento. Hay que dejar esa mentalidad negativa y pesimista. Hay que dejar ese ensimismamiento que no nos permite ver más allá. Dejemos nuestra falta de fe y confiemos en que sí es posible conocer la realidad y transformarla.

P. Orlando Pérez
Sacerdote católico, Licenciado en Teología, Licenciado en Psicología General, catedrático universitario, con una maestría en Docencia Superior Universitaria.